En El Altavoz Musical hemos podido hablar con el cantante Gerard Martín. Nos ha contado cómo fueron sus inicios en el mundo de la música y lo que aprendió en todas las bandas de las que formó parte. También nos ha hablado sobre Aire de Mercurio, su primer EP auto editado. Nos ha explicado lo especial que es Luces de Ciudad, su primer disco, en el que cuenta con colaboraciones como la de Lucas Masciano y muchas cosas más. ¿Necesitas algún motivo más para quedarte?
¡Bienvenid@ a la entrevista de Gerard Martín!
El Altavoz Musical: ¿Quién es Gerard Martín? ¿Cómo te definirías?
Gerard Martín: Gerard Martín es un chaval de 24 años nacido en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), con inquietudes musicales y pasión por las canciones. Me gusta cantar, tocar la guitarra y componer. Es complicado definirse a uno mismo porque a uno lo definen, pero en mi caso me considero un chico intenso, agradable y carismático. Me gusta conectar con el público, ya sea a guitarra y voz o con banda, y adaptar al escenario lo que representan las canciones para mí y así crear todo un mundo a mi alrededor.
E.A.M: ¿Cuándo empiezas a interesarte por el mundo de la música?
G.M: Pues desde bien pequeño. No recuerdo una edad en concreto, pero desde que tengo uso de razón tal vez.
E.A.M: Antes de comenzar con tu proyecto en solitario, formaste parte de bandas como The Fish Memory Band, The Blues Boys, Muy Stone y Marionetas. ¿Cuál era tu papel en ellas?
G.M: Principalmente tocaba la guitarra o el bajo y empezaba a cantar coros.
E.A.M: ¿Han sido importantes para tu aprendizaje en la música?
G.M: Allí mi papel era secundario. Era un componente más. En Fish Memory Band formé la banda junto a unos amigos y fue mi primera experiencia como músico. Me curtí muchísimo y aprendí un montón, pasaron cosas muy guays. Con el resto de las bandas me formé mucho también y aprendí a trabajar en equipo. Creo que eso es muy importante.
E.A.M: ¿Qué te llevó a dar el paso de comenzar con un proyecto propio?
G.M: Supongo que las ganas de sacar algo en lo que solo tuviera yo el poder de decisión. Aunque al final tampoco fue tan así, ya que en este proyecto en solitario también ha trabajado mucha gente de la que he aprendido mucho y han acabado teniendo un papel fundamental en él. Pero básicamente el hecho de componer yo mismo las canciones y de querer cantarlas me empujó a creer en lo mío y en mis posibilidades.
E.A.M: ¿Te has encontrado con muchos obstáculos para poder dedicarte a lo que verdaderamente te gusta?
G.M: Sí, por supuesto. Este mundo es enorme y a veces despiadado, lleno de vueltas y rincones. Sólo basta en parpadear para que desaparezca el momento. Los obstáculos han formado parte de mi camino y muchos de ellos están plasmados en mis canciones.
E.A.M: En 2016 lanzas Aire de Mercurio, un primer EP auto editado. ¿Cómo recuerdas todo el proceso, desde que decides dar el paso, hasta que lo ves publicado?
G.M: Pues esa etapa la recuerdo con mucho cariño. Fue el principio de todo esto y justo empezaba a hacer canciones. Recuerdo un proceso lento pero agradecido. Aprendí mucho con David Chueca porque me dio muchísimo. A nivel musical es un tipo con mucho talento y creatividad, y por aquel entonces yo flipaba con todo lo que me iba sucediendo. La verdad es que fue muy bonito todo. Fue lo primero que hice pero con mucho mimo y aprecio.
E.A.M: Después de esto llega una gira con más de 30 conciertos por España. ¿Cómo es la reacción del público ante este primer trabajo?
G.M: Pues hay de todo. Generalmente bien. La gente que viene a los conciertos conecta con las canciones y les gusta el proyecto. Hay muchos conciertos en los que suceden cosas que no se pueden explicar con palabras. Yo estoy muy contento de como han ido. Me han ayudado mucho a entenderme a mí mismo y me enseñan que hay que seguir trabajando mucho.
E.A.M: Actualmente, te encuentras promocionando Luces de Ciudad, tu primer disco. Cuando Todo Empezó a Arder fue el primer single que tus seguidores recibieron muy bien.
G.M: Así es.
E.A.M: ¿Qué querías transmitir con esta canción?
G.M: Pues con esa canción quería transmitir diversión. Es muy sexual. Habla de dos personas que deciden quemarlo todo en una noche. Está llena de imágenes y de metáforas.
E.A.M: ¿Cómo fue ver todo ese apoyo, cuando solo habías publicado una canción del disco?
G.M: Pues la verdad es que muy bien. A la gente le gustó el nuevo sonido y empezamos a ver que sucedían cosas. Que a la gente le llegaba y lo compartía. Fue súper ilusionante.
E.A.M: Luces de Ciudad es la canción que da nombre al álbum y que compartes con Lucas Masciano. ¿Cómo surge esta colaboración?
G.M: Esta colaboración surge a través de la amistad y de la admiración. Soy muy fan de Lucas desde hace muchos años. Cuando estaba empezando en esto me ponía sus canciones y me las intentaba sacar con la guitarra. Unos años después lo conocí en una sala y fuimos coincidiendo en algunos conciertos. A partir de allí, lo llamé para contarle que quería que saliera en Luces de Ciudad y aceptó. Fue muy loco verlo cantar una letra mía y tenerlo en el disco.
E.A.M: Ahora estás a punto de terminar la gira de presentación de este disco. Una vez finalice, ¿cuáles son los planes de futuro de Gerard Martín?
G.M: Pues me voy a poner a grabar una versión en acústico de Cuando Todo Empezó a Arder y la sacaremos en plataformas digitales para que la gente la pueda disfrutar. Luego grabaremos algunos vídeos para Youtube y para 2020 sacaré algún single más. No lo sé, tengo que parar un poco y coger perspectiva de nuevo para volver a renovar las pilas.
E.A.M: Si miras atrás y ves todo el camino recorrido, ¿piensas que ha merecido la pena todo el esfuerzo por dedicarte a la música?
G.M: Sí, sin duda. Gracias a la música hoy en día soy lo que soy y eso es así. Sin ella no sabría definirme ni sabría decirte qué o quién sería, la verdad.
E.A.M: Por último, ¿nos recomiendas algún artista o grupo emergente? ¿A quién deberíamos escuchar?
G.M: Pues… sin duda debéis escuchar a mi queridísimo Luis Carrillo. O a Luis Fercán, que lo conocí hace poco. De bandas, ahora mismo estoy escuchando a Destino 48, que han sacado un discazo hace nada. Mucho talento.
Imágenes: Gerard Martín.